En De historias, Actos y Rostros digo que el prejuicio que tenemos en cuanto al otro, puede mas que la realidad evidente y hablo específicamente por mí. Yo por ejemplo me considero un gran prejuicioso y en base a la primera imagen, tejo en mi cabeza loca una versión librísima de la vida y obra del ser objeto, generalmente por la imagen y algún gesto suelto del cual puedo agarrarme para tejer cual chismosa de barrio. Por todo eso y mas, me denomino, “La Marica Prejuiciosa.” No es una cualidad endémica en mí, pues todos estamos en mayor o menor escala afectados por el prejuicio ante la duda y en muchos casos suele ser un mecanismo de defensa que justifica nuestro propio modo de actuar.
Es pues una propuesta sin grandes pretensiones, es parte del juego en el que ando y con el tono grotesco que caracteriza mi obra, voy y vengo haciendo lo que se me antoja, con un pequeñísimo toque reflexivo.
Tetera XXI.
Acrílico pastel s/papel
39x28cm
2010
Divertimento de Juan.
Acrílico papel s/pastel
39x28cm
2010
Pepe y Ró.
Acrílico pastel s/papel
39x28cm
2010
Juan.
Acrílico pastel s/papel
39x28cm
2010
Luis.
Acrílico pastel s/papel
39x28cm
2010
Victor.
Acrílico pastel s/papel
39x28cm
2010
José.
Acrílico pastel s/papel
39x28cm
2010
Juanito.
39x28cm
Acrílico pastel s/papel
2010
Auto en el Patio.
Acrílico pastel s/papel
39x28cm
2010
Pedro XXI.
Acrílico pastel s/papel
39x28cm
2010
Rosa.
Acrílico paste s/papel
39x28cm
2010
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